Sin título
«Quien arroja libertad no reconoce el paño»
le dije al cuadro.
Solo vi formas
y se expuso erguido, juzgándome.
Sus cuernos, orientados hacia el norte
(como si el musgo creciera en otra dirección),
afilados y cobrizos.
No soy yo, no soy yo.
El mecanismo giratorio de la duda.
«Quien imagina caminos no llega nunca» respondió.
Sem título
«Quem lança liberdade não reconhece o pano»
disse ao quadro.
Só vi formas
e expôs-se ereto, julgando-me.
Seus cornos, virados para norte
(como se o musgo crescesse noutra direcção),
afiados e cobreados.
Não sou eu, não sou eu.
O mecanismo giratório da dúvida.
«Quem imagina caminhos nunca chega» respondeu.