Mostrar mensagens com a etiqueta esther ramón. Mostrar todas as mensagens
Mostrar mensagens com a etiqueta esther ramón. Mostrar todas as mensagens

05 janeiro 2014

esther ramón

Forzar el hecho. Con sopletes. No prende la habitación cerrada, la cáscara vertical de la semilla. Al hombre que quema el germen le crece una barba espesa y negra, en surcos interiores, roturados con minúsculas partículas de hierro. En las mejillas. En los ojos. En los pulmones que respiran al revés, expirando oxígeno.
Le ayudo. Sin querer extiendo la fuerza oculta de mis manos para empuñar el fuego que asola las cosechas, el grano intacto. Sin querer entierro el pan crudo y dividido, lo riego con alcohol, con gasolina y leche. Sin querer manipulo, una a una, las cremalleras de las piedras que repiten, amarillas, la misma sílaba. 
Quemamos contandohacia atrás: ocho milenios, cinco toneladas, uno y otra vez uno.
Encerrado, dividido. En el creciente fértil.


Forçar a coisa. Com maçarico. Não prende o quarto fechado, a casca vertical da semente. Ao homem que queima o gérmen cresce-lhe uma barba espessa e negra, em sulcos interiores, lavrados com minúsculas partículas de ferro. Nas bochechas. Nos olhos. Nos pulmões que respiram ao contrário, expirando oxigénio.
Dou um empurrão. Sem querer estendo a força oculta das minhas mãos para empunhar o fogo que assola as colheitas, o grão intacto. Sem querer enterro o pão cru e dividido, rego-o com álcool, com gasolina e leite. Sem querer manipulo, uma a uma, o fecho das pedras que repetem, amarelas, a mesma sílaba.
Queimamos contando para trás: oito milénios, cinco toneladas, um e outra vez um.
Fechado, dividido. No crescente fértil.